
- Generalmente los masajes bien efectuados no tienen contraindicaciones o efectos perjudiciales, pero si tenemos que tener en cuenta que hay momentos en los que no se deben realizar y esperar a que estos factores desaparezcan. Los más comunes son:
- Sobre heridas abiertas, como ocurre con las úlceras por decúbito.
- En fracturas recientes.
- Problemas en la piel, como irritación y alergias.
- Pacientes con infecciones agudas.